¿Cuánta agua tiene el cuerpo humano?

La importancia de mantenernos hidratados es indiscutible, aunque solemos olvidarlo debido a la vorágine de actividades diarias. Aun así, nuestro cuerpo no lo olvida y nos pide agua constantemente, ya que es un elemento esencial para el funcionamiento y mantenimiento de nuestros órganos. 

En este artículo vamos a conocer qué porcentaje de agua hay en el cuerpo. También, veremos las funciones que cumple este líquido en nuestro organismo y los beneficios que aporta una correcta hidratación.

Sin perder más tiempo, ¡comencemos!

¿Qué porcentaje de agua tiene nuestro cuerpo?

Para contestar rápidamente a la pregunta que motiva este artículo, nuestro cuerpo contiene entre 60% a 70% de agua. Por este motivo, debes mantenerte correctamente hidratado. Puede que también te interese nuestro artículo: ¿Cuántos litros de agua debemos tomar por día?

Pero, cabe preguntarnos, ¿cómo está distribuido todo ese porcentaje? Partiendo de estudios que buscaban analizar la composición del cuerpo humano¹, además de investigaciones sobre los efectos de la hidratación en el cuerpo², se ha podido establecer que, en efecto, las células que componen nuestro cuerpo contienen un alto porcentaje de agua y que podemos calcular cuanta agua tiene cada órgano según las células y tejidos que los componen.

Según la información compartida por la revista Medical News Today, así se distribuye el agua en nuestro organismo:

• Cerebro y riñones: 80% a 85% 
• Corazón y pulmones: 75% a 80%
• Músculos, hígado y piel: 70% a 75% 
• Sangre: 50%
• Huesos: 20% a 25%
• Dientes: 8% a 10%

Ahora bien, todos nuestros órganos principales requieren de agua, lo cual es un claro indicador de que este líquido impacta directamente en nuestras actividades cotidianas. Lo cual nos lleva a pensar en ¿cuáles son las funciones del agua en nuestro cuerpo? 

Funciones del agua en nuestro cuerpo

Veamos en detalle cuáles son estas funciones: 

1. Regulación de la temperatura corporal: el agua ayuda a mantener la temperatura interna de nuestro cuerpo, esto se da por medio de la transpiración. Cuando la temperatura aumenta, el cuerpo expulsa agua en forma de sudor que al evaporarse tenga el efecto de enfriarnos y ayudarnos a volver a una temperatura normal.
2. Transporte de nutrientes y oxígeno: la principal forma en que nuestro cuerpo recibe esto es por medio de la sangre y su recorrido. Sin embargo, también la presencia y uso de agua en nuestros intestinos es fundamental para la absorción de nutrientes.
3. Eliminación de desechos: nos ayuda a eliminar toxinas y productos de desecho a través de la orina y del sudor, los riñones dependen del agua para filtrar todos los desechos metabólicos, y también para expulsar esos residuos.
4. Lubricación de las articulaciones: el líquido sinovial, que se encuentra en las articulaciones, está compuesto en mayor parte por agua. Funciona como lubricante natural y reduce la fricción entre los huesos durante el movimiento.
5. Protección de órganos y tejidos: el agua actúa como amortiguador entre órganos y tejidos importantes, como el cerebro, la médula espinal. Otro ejemplo es el feto durante el embarazo rodeado por líquido amniótico. Aparte de protegerlos, los mantiene hidratados, ayudando así a que funcionen correctamente.
6. Ayuda a la digestión: como mencionamos anteriormente, el agua a nivel intestinal facilita el proceso de absorción de nutrientes, pero desde la producción de saliva, jugos gástricos para descomponer los alimentos en el estómago, ya usa una cantidad de agua, incluso para prevenir el estreñimiento este líquido es fundamental.
7. Mejora la función cognitiva: nuestro cerebro que contiene un algo nivel de agua requiere de un buen nivel de hidratación para poder mantener una buena memoria, un adecuado nivel de concentración y el rendimiento cognitivo. Estar deshidratados, puede afectar desde nuestro estado de ánimo a disposición para realizar cualquier actividad que debamos realizar.

Podemos concluir sin lugar a dudas que sin la cantidad de agua adecuada, muchos de los procesos que realiza nuestro cuerpo pueden verse afectados, ya que su función principal es mantener la homeostasis, o mejor dicho, el equilibrio interno entre todos los órganos y tejidos para que el cuerpo pueda funcionar sin ningún tipo de inconveniente. 

¿Qué beneficios nos aporta una buena hidratación?

Así, al conocer la mayoría de funciones del agua en nuestro cuerpo, hablemos de los beneficios que podemos gozar gracias a mantener una buena hidratación constante. 

1. Mantener el funcionamiento del cuerpo, ya que permite que este realice todas las tareas necesarias.
2. Mejorar la digestión: Para procesar los alimentos y lograr sacar el mejor provecho de los mismos sin desgastar los órganos que deben completar esta labor.
3. Mejorar la concentración y la claridad mental: La hidratación adecuada nos mantiene despiertos, nuestro cerebro se encuentra en las mejores condiciones para trabajar.
4. Facilita eliminar toxinas: El cuerpo entonces no acumulará desechos, evitando así enfermedades, inflamaciones y complicaciones a largo plazo.
5. Cuidado de la piel: Una piel suave e hidratada es indicador de buena salud. 
6. Protección de labios y ojos: Evita la resequedad e irritación de los mismos, además, son de los órganos que primero exhiben señales de deshidratación.
7. Ayuda al crecimiento del cabello, pues lo mantiene fuerte y saludable.
8. Proteger las articulaciones, al mantenerlas lubricadas, evitando la fricción entre las mismas. Esto puede ser muy doloroso y riesgoso a largo plazo, dificultando la movilidad de distintas partes del cuerpo.
9. Contribuir a la termorregulación corporal por medio de la producción de sudor, esto funciona para acompañar momentos en los que el cuerpo batalla infecciones, como en momentos en que el cuerpo atraviesa cambios de temperaturas.
10. Fortalecer el sistema inmunológico, este se fortalece si el cuerpo se mantiene sano y estable. Ya que su principal función es proteger el cuerpo. Al hallar un problema en alguna parte, intentará activar las formas de protegerlo, para esto, necesita funcionar óptimamente.

Esto siguiente, la presencia del agua en nuestro cuerpo nos da una idea en profundidad de la tarea del agua en nuestro cuerpo; no obstante, si lo hablamos en las actividades que pasan fuera de nuestro cuerpo, podemos considerarlo de la siguiente forma:

Hidratarnos facilitará que nuestro cerebro funcione correctamente, así que las tareas que realizamos en nuestro trabajo, por lo menos, podrán contar con un cerebro despierto, con la capacidad de concentrarse, además, si nuestro sistema digestivo y cerebro cuentan con el agua necesaria para absorber nutrientes, nuestro cuerpo tendrá la energía que requiere para hacer las tareas que realizamos diariamente. 

Conclusión: ¿Por qué es importante mantenernos hidratados?

Así pues, la razón por la cual es importante mantenernos hidratados es para que nuestro cuerpo funcione, ahora, suena como si esto fuera algo separado a nosotros mismos, pero el hecho de que nuestro cuerpo funcione correctamente trae como consecuencia directa que nos sintamos bien. 

Y sentirse bien se refiere a sentir que tenemos la energía para hacer ejercicio, caminar, ir y volver de nuestro trabajo, que podemos dormir bien, que podemos respirar y nuestra piel no se siente incómoda porque se siente muy estirada, lo cual es señal de deshidratación, o nuestros ojos pueden leer claramente y no arden o lloran porque les hace falta líquido para funcionar debidamente. 

Ahora, sabiendo lo esencial, el agua para el ser humano, es inevitable no considerar lo importante que tengamos acceso a un agua de calidad, un agua potable debidamente purificada que no traiga desechos o sedimentos que puedan dificultar que nuestro cuerpo funcione correctamente, ¿no? Si quieres saber cómo contar con la mejor agua en tu hogar o en tu espacio de trabajo, puedes contactarte con nosotros. 

1. Mitchell, H.H., Hamilton, T.S., Steggerda, F.R., and Bean, H.W., 1945, The chemical composition of the adult human body and its bearing on the biochemistry of growth: Journal of Biological Chemistry, v. 158, issue 3, p. 625-637. ↩︎
2. Barry M. Popkin, Kristen E. D’Anci, and Irwin H. Rosenberg.  Water, Hydration and Health. Journal of Nutrition Reviews and also, shared in the National Library of Medicine of the NIH. ↩︎