Todos los días, si contamos con el privilegio, podemos levantarnos y servirnos un vaso de agua recién filtrada, o podemos lavarnos nuestro rostro para quitarnos el sueño y empezar nuestro día. Día a día tenemos acceso seguro a agua potable gracias a un sistema de acueducto establecido mucho antes de haber llegado a ese lugar; no obstante, cabe preguntarse ¿cómo llega el agua a mi casa?
Saber de dónde viene el agua es una forma de conocer un poco más sobre esta preciada y esencial sustancia, conocer sobre todo su recorrido para llegar a nuestros hogares no solo nos permitirá apreciarla mejor, sino comprender más las noticias que nos llegan sobre sus regulaciones, costo, manejo y cuidado.
Tal vez si pensamos a cuando éramos más jóvenes, probablemente habremos preguntado alguna vez cómo llega el agua a nuestra casa, puede que hayamos aprendido sobre el ciclo del agua, sobre las fuentes de agua naturales o incluso, escuchado acerca del intrincado proceso de potabilización; sin embargo, aquí vamos a aprender con claridad sobre el recorrido del agua para llegar diariamente a nuestro hogar.
El origen del agua
Cuando nos preguntamos de dónde viene el agua que tomamos, puede que simplemente pensemos en las fuentes de agua que nos acompañan geográficamente, ¿estamos cerca de ríos, lagos o incluso estamos cerca del mar? Sin embargo, estas fuentes de agua tienen su propia historia y muchas veces no son directamente el lugar del cual sale el agua que usamos a diario.
El origen del agua ha sido investigado de manera exhaustiva, más al saber que este planeta parecía ser el único que contenía dicha sustancia. Recordemos que el agua es una sustancia química en esencia conformada por una molécula de hidrógeno y dos de oxígeno; este primer elemento químico, según científicos de la NASA, se vincula con el mismo Big bang, mientras que el oxígeno se encuentra en el núcleo de estrellas.
Por otro lado, geólogos han vinculado la presencia de agua en nuestro planeta con rastros de los elementos en asteroides y cometas que colisionaron con el planeta hace millones de años, ya que en el interior de estos hay hielo y agua. Además, estaba el vapor en la atmósfera que con cambios de temperatura se volvía agua líquida, con el paso del tiempo pudo generar las condiciones necesarias para que surgiera vida.
Paralela a la mezcla constante de los elementos químicos, sus transformaciones por los cambios de temperatura, también están los movimientos del mismo planeta. Sabemos de volcanes, movimientos de placas tectónicas, poco a poco y a lo largo de millones de años la tierra se organizó a lo que es hoy, dando paso a fuentes de agua diversas.
Y es de esa variedad de fuentes de agua en la que tendremos una información vital para comprender exactamente cuál es el agua que llega a mi casa, de dónde viene exactamente y cómo llega, ya que no se usa cualquier tipo de agua, o mejor, no cualquier tipo de agua tiene el mismo tratamiento para poder llegar a nuestros hogares.
Pero antes de adelantarnos a ese proceso, también debemos nombrar que ese proceso natural de la formación del planeta, trae de la mano el ciclo natural del agua, que también moviliza el agua en sus diferentes estados por el mundo. Por ciclos de lluvias, estaciones de invierno, temporadas de verano, el agua se evapora, se condensa, y llueve constantemente, y esto es parte fundamental del equilibrio del ecosistema en el que habitamos.
El camino del agua hacia nuestras casas
Como ya habrán escuchado, el planeta Tierra está cubierto en su mayoría por agua, se estima que un 70% de su superficie está cubierta por este líquido; aun así, no podemos emplear toda esta agua para el consumo humano, no es infinita, no es tanta como creemos.
Las fuentes de agua se pueden dividir de distintas maneras, una de ellas es en superficiales y subterráneas, las aguas superficiales como tal se subdividen en aguas dulces y aguas saladas, esto implica ya por su nombre que existe una diferencia en su composición. Esto es relevante porque implica un tratamiento especial para poder ser consumida por nosotros y por otros seres vivos incluso.
Entonces, ¿si vivimos cerca del mar, es desde ese mismo mar que sale el agua que llega a nuestros hogares? La respuesta puede ser tanto afirmativa como negativa; ¿existen otras fuentes de agua cercanas a donde vives? Porque la verdad es que tratar agua salada es un proceso costoso que suele desperdiciar más agua. El agua que se usa para potabilizar y consumir es agua que viene de fuentes superficiales dulces o agua subterránea.
Dentro del agua subterránea tenemos el agua que está en acuíferos, agua manantial que es sustraída con procesos cuidadosos y que dependen de los terrenos en los que se encuentra el acuífero. El agua que se ha acumulado bajo tierra ha llegado allí con el paso de los años, filtración de agua de lluvia, agua que ha quedado entre las rocas y los movimientos de las mismísimas capas tectónicas.
Ha sido un proceso natural complejo, lo cual habla de cantidades finitas de agua, es decir, la cantidad del agua dentro de un acuífero puede reducirse hasta el punto que no puede seguirse usando, dejando así poblaciones enteras sin agua. Es por esto, que por más que existan grandes cantidades de agua en el planeta, debemos comprender que no es fácil que llegue a nuestro hogar agua debidamente tratada.
Este tratamiento para poder consumir el agua se le conoce como proceso de potabilización, es decir, convertir el agua natural o cruda en agua potable. Por medio de este proceso logramos que el agua no tenga ningún tipo de contaminante, que su pH sea neutro, que la presencia de químicos o minerales sea el que ha indicado la OMS como el correcto para que el agua sea bebible por personas.
Para que el agua llegue a la planta de potabilización debe ser sustraída de una fuente, sea un acuífero, sea depositada en una represa, pero debe ser tomada de un lugar y llevada a una planta de tratamiento. Incluso, si se instala en los propios hogares un pozo para acceder a agua cruda de una fuente natural cercana, vas a necesitar seguir los procesos necesarios para que el agua que llegue a tu casa sea agua de la mejor calidad posible.
En Uruguay las fuentes de abastecimiento de agua son tomadas de ríos y acuíferos dependiendo la zona del país, por ejemplo, el río Santa Lucía es de una de las fuentes más importantes del área metropolitana1, por otro lado, también se pueden encontrar fuentes subterráneas en relación con la cuenca de San Antonio2.
Por más de que existen diversas fuentes, el proceso de abastecer y mantener agua que puede tratarse para el consumo es mucho más complejo de lo que creemos, los problemas como la contaminación, el crecimiento acelerado de la población, traen consecuencias que nos obligan a ser conscientes de cómo usamos el agua.
Mejora la calidad del agua que tomas
Debido al arduo proceso que debe realizarse para que el agua llegue a nuestra casa, es de gran importancia que cuidemos el agua y que, también, busquemos cómo podemos proteger el agua en nuestros hogares.
Saber que tenemos acceso a agua no nos garantiza tener un agua de calidad, es por eso que sumar filtros purificadores en nuestro hogar no solo nos permite ahorrar en el consumo del agua o en otros tratamientos más complejos; sino que también nos asegura un cuidado a nuestra salud y bienestar. Con nosotros podrás encontrar los mejores purificadores para tu hogar.
- Abastecimiento de agua OSE Uruguay http://www.ose.com.uy/agua ↩︎
- Fuentes de abastecimiento y vertido de aguas residuales Cuenca arroyo de San Antonio https://www.gub.uy/ministerio-ambiente/sites/ministerio-ambiente/files/2020-11/Adjunto_IV_OSE_Natalia_Baccardatz_0.pdf ↩︎